sábado, 9 de mayo de 2015

Limpieza energética de primavera: romero, romero, que salga lo malo y entre lo bueno...

Cuando llegan los cambios de estación a veces notamos que nuestra casa está como "triste" y apagada, y es cuando pensamos: "este verano tengo que pintar". Pero antes de irte al almacén de pinturas más cercano y liar un follón del quince en casa con el rodillo y la cinta de pintor, prueba a hacer una simple limpieza energética de tu casa y verás cómo cambia el ambiente y hasta la luz que entra por las ventanas. Aunque ya he hablado de ello en mi vídeo de esta semana, en mi canal de Youtube, os dejo aquí unos cuantos trucos por si no tenéis tiempo de ver el vídeo.
Una limpieza energética no es difícil y puede ayudarnos a que nuestra casa tenga un aspecto más acogedor y vuelva a ser nuestro refugio, el nido en donde descansar y recuperarnos de la lucha diaria. Nuestra casa debería ser un lugar de relax, no una fuente de tensión y malos rollos. Cuando la energía de nuestra casa no es la adecuada, en seguida notamos que no estamos a gusto, que discutimos con nuestra familia con más facilidad por tonterías y que descansamos peor e incluso tenemos problemas para conciliar el sueño y dormir profundamente. 
Si en nuestra casa las energías no son las correctas en gran parte se debe a que nosotros mismos traemos de fuera malos rollos que acaban afectando a nuestro hogar. Nuestra casa no genera energía por sí misma, sino que somos nosotros los que la nutrimos de nuestra propia energía y por eso es por lo que si yo llego a casa rebotado, mi casa parecerá un lugar más oscuro de lo que es. Amigos míos, todo se pega menos la hermosura...
Por suerte tenemos varios métodos muy sencillos para corregir este problema y conseguir que la energía de nuestro hogar sea correcta y nos permita sentir de nuevo que las cuatro paredes que nos cobijan son nuestro refugio del mundo exterior, el lugar donde estamos a salvo y protegidos y podemos descansar con tranquilidad. Para ello vamos a utilizar elementos que tenemos en casa o que podemos conseguir con mucha facilidad en un supermercado:
  • Limpieza con sal: Cogemos un paquete de sal gruesa (es más fácil de barrer. Si no la encontráis vale sal fina, pero es más rollo para barrerla) e iremos habitación por habitación empezando por la más alejada de la puerta de entrada. Esparcimos la sal por la habitación y barremos (con la escoba normal y corriente, la de limpiar la casa) desde el interior de la habitación hacia la puerta. Tenemos que hacerlo en todas las habitaciones de la casa y siempre empujando la sal que vamos acumulando hacia la puerta de entrada. Cuando hayamos terminado con todas las habitaciones, barremos la sal fuera de la casa y la recogemos allí, fuera, y NO VOLVEMOS A METER ESA SAL EN CASA. La echamos en una bolsa de plástico y la tiramos fuera de casa en un contenedor. Además, no barremos sin más, sino que barremos pensando en echar de nuestra casa a todo aquél/ aquello que no deba estar ahí. Si os enfadáis, mejor que mejor. Hay que barrer con energía, con mala leche, enfádate con ese mal rollo que percibes en tu casa y échalo a tomar por lichi.
  • Esencias para limpiar las malas energías: es conveniente tener un quemador de esencias que sea profundo y admita bastante agua para no sólo quemar esencias perfumadas que nos gusten, sino para de vez en cuando usar hierbas y especias que ayuden a limpiar energéticamente nuestra casa. Podemos usar romero, tanto fresco como la hierba seca que encontramos en los supermercados (el romero es un gran protector frente a las malas vibraciones de otros), nuez moscada (potente rebotador de hechizos, conjuros y mal de ojo), bayas de enebro (gran limpiador energético. Con las que sobren nos hacemos un gin- tonic...) y pimienta negra (rechaza ataques energéticos o mágicos). Podemos mezclar varias especias o poner una sola. Por supuesto, vigilad siempre que tienen agua suficiente y nunca dejéis una vela encendida sin vigilancia.
 Con estos sencillos pasos conseguiremos que en muy poco tiempo la energía de nuestra casa se calme y vuelva a ser el hogar al que estamos deseando volver, donde reponer nuestras fuerzas y sentirnos protegidos del mundo exterior.

sábado, 2 de mayo de 2015

Los signos de agua: Cáncer, Escorpio y Piscis. La Casa I: el Ascendente.

Buenos días, os dejo el enlace a mi vídeo de ayer, jueves, donde hablo de los tres signos de agua, de la división de la Carta Natal y de la Casa I, que define nuestro Ascendente. El próximo jueves hablaremos de los signos de Aire y de la Casa II.